Hoy quiero contarles sobre el mar del Perú.
Para empezar, el mar del Perú es increible, ¡pasu es grandazo!
Yo nací en los andes, no lo conocía y cuando a veces
subíamos a los cerros más altos, se veía una línea al fondo al fooondo, azulita. Mi mamá me decía "ese es el mar, Kunaq, un día te vamos a
llevar para que conozcas".
Y así fue, un día fuimos con mis primos en las vacaciones.
¡Nunca habíamos visto tanta agua junta!
El mar del Perú es muy rico en peces y en sus islas viven muchas aves como el pingüino de Humbolt, el guanay o el piquero.
Pero no todo es bonito, existe mucha pesca ilegal
artesanal e industrial y las autoridades todo el tiempo tienen que vigilarlo
para protegerlo.
Sus aguas son frías en casi todo su tamaño, menos en las
costas del norte como en Piura y Tumbes que son más calientitas y sus playas más
soleadas. ¡Los hoteles y resorts de playa más bonitos están allá!
El mar del Perú se ve verde ya que tiene muchísimo
fitoplacton, que son algas chiquititas con las que se inicia la cadena
alimentaria. Por eso es un mar muy rico en especies marinas.
Muchas de las mejores olas del mundo para hacer surf están en el mar del Perú. Son famosas sus playas Pico Alto, Cerro Azul, Cabo Blanco, Peñascal... pero yo no corro olas porque todavía no sé
nadar. Algún día ¡seguro que sí!
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